Este año se celebrarán elecciones en el Estado de México, para elegir gobernador o gobernadora.
El escenario, se plantea complicado, para poder aventurar un eventual ganador, teniendo en cuenta diversas circunstancias, que no son el valor principal de este escrito.
Sin embargo, existen una serie de elementos, de forma independiente a las circunstancias contextuales, deberán aglutinar aquellos que opten a conseguir dicho puesto de elección popular.
1. Dominio de miedo escénico: Confianza, credibilidad y autoridad, son 3 aspectos básicos que debe conseguir cualquier candidato, cuando está delante de una audiencia; pero los nervios, pueden ser un gran enemigo para lograrlo. Ser capaz de controlarlo, se hace fundamental para lograr el objetivo marcado.
2. Conocer al público: Saber cuáles son las necesidades y deseos del electorado, de la forma más focalizada posible, ayudará a poder elaborar un mensaje más cercano a la ciudadanía. Es necesario que los candidatos tengan algo claro, la desafección hacia la política y hacia ellos, es cada día mayor por parte de una ciudadanía cansada de promesas vacías. Es por tanto necesario, conocer lo mejor posible a los ciudadanos para entenderlos y buscar una cercanía efectiva.
3. Tener un mensaje claro: Esto implica dos elementos. Por un lado, cada candidato sólo deberá tener uno o dos temas principales; de esta manera, evitará que se diluya el mensaje. Por otro lado, la repetición del mismo, es clave para su grabación en el elector. Al igual que para clavar una punta, es necesario golpear varias veces con el martillo, para incrustar un mensaje en el electorado, se necesita una repetición del mismo.
4. Ser lo más emocional posible: Siempre es más fácil persuadir a través de las emociones que a través del raciocinio. Esto no quiere decir que el mensaje deba sólo ser emocional, sino que la emoción está por encima de la razón.
5. Tener una buena puesta en escena: Esto significa, que además de tener un buen mensaje, es necesario que los oradores acompañen al mismo. Manejo de la comunicación no verbal, una buena articulación y dicción, un manejo de la voz adecuado, etc.
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Aunque se podrían añadir más elementos, estos son los más básicos a aplicar en una campaña. El ex candidato y actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, es un ejemplo de la aplicación correcta de estos elementos.
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