Esta magnífica criatura puede nadar hasta 1km en agua dulce, posee una excelente memoria a largo plazo y se orienta marcando árboles.
Durante la hibernación estos osos pasan hasta 7 meses sin comer, por lo cual previo a este suceso ingieren hasta 15 mil calorías diarias.
Al ser oseznos son cuidados por su madre hasta que alcanzan los dos años, y ya como adultos andan en solitario; reuniéndose con otro ejemplar únicamente durante los periodos de apareamiento y crianza.
Con un peso registrado de hasta 291 kilogramos, los osos negros mexicanos habitan zonas boscosas poco accesibles de Sonora, Chihuahua, Nuevo León y Coahuila.
Anteriormente estas fuertes criaturas habitaron grandes extensiones de bosques en Sonora, Chihuahua, Durango, Zacatecas, Jalisco, Aguascalientes, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Nayarit y San Luis Potosí.
Debido a la pérdida de su hábitat por la tala ilegal y cambio de uso de suelo; cacería furtiva, comercio de sus partes para el mercado asiático, así como el cambio climático, esta especie se encuentra en peligro de extinción, de acuerdo con la NOM-059-SEMARNAT-2010.
Te puede interesar: Alcalde de Ocuilan, Felix Alberto Linares, denuncia atentado en su contra
A pesar de que ésta es la última especie de osos en México, los esfuerzos para su protección son pocos y se desconoce con certeza el número de ejemplares que quedan actualmente en nuestro territorio.
Imagen: amc-nh.org © Sam Jamke
BLOG COMMENTS POWERED BY DISQUS