Este miércoles 8 de julio los centros comerciales de la Ciudad de México reabrieron bajo el esquema del semáforo naranja y la "nueva normalidad", sin embargo poco le importó a la ciudadanía que se volcó a estos espacios pese a los altos contagios que aún persisten en la capital del país.
Entre las medidas acordadas por las cámaras comerciales y el Gobierno de la Ciudad de México para la reapertura de estos espacios están: que los asistentes no excedan la permanencia de 1 hora en centros comerciales y de 40 minutos en tiendas departamentales; priorizar la ventilación natural; la entrada de una persona, con excepción de un adulto acompañado de un menor o una persona adulta mayor al lugar; que únicamente las personas que porten cubrebocas puedan ingresar; un horario de apertura de 11 a 17 horas, a excepción de aquellos negocios esenciales como lo son las farmacias; filtros sanitarios; un acceso y una salida; el aforo máximo del 30% de la capacidad del lugar; la suspensión de los productos de prueba, como perfumes y cremas, así como de los probadores de ropa; además de la reducción de los cajones de estacionamiento.
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Asimismo los centros comerciales y tiendas departamentales deberán tener contadores de asistentes y automóviles para crear estimaciones de flujo por hora. Siendo sancionados aquellos negocios que incumplan, siendo acreedores primero a un llamado de atención y después al cierre.
Sin embargo, este primer día no salió como lo esperaban las autoridades pues los centros comerciales se vieron abarrotados, siendo evidente que familias enteras y grupos de amigos ingresaban sin respetar los minutos de estancia máxima, ni la sana distancia.
A pesar de que en la Ciudad de México se tiene un semáforo naranja, es decir, de apertura parcial de las actividades económicas y sociales pero bajo el nuevo esquema de sanidad, los asistentes a estos lugares hicieron caso omiso, con razones como que "estaban hartos" del encierro voluntario o para aprovechar las ofertas de temporada, a pesar de que la mayoría de las tiendas departamentales y que se encuentran dentro de los centros comerciales cuentan con tiendas en línea, por lo que la misma mercancía puede ser comprada vía internet.
Usuarios de las redes sociales compartieron fotografías y videos de este comportamiento y la violación de la reglamentación, como en el caso del centro comercial Parque Delta. Mira el video aquí.
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Al respecto, hay que señalar que en México, al 8 de julio, hay 32,796 muertes por COVID-19 registradas y 275,003 personas contagiadas. Mientras que en la CDMX hay 6,021 defunciones por esta causa y 54,405 contagios.